Alfarero

Artesanía en Totana


La artesanía en Totana siempre ha sido una gran fuente de desarrollo, diversificando entre una gran variedad de piezas de alfarería y cerámica. Esta actividad, de origen medieval, posee una larga tradición y una clara raigambre entre los habitantes de esta ciudad donde se encuentra una gran concentración de talleres artesanales, que son en su mayor parte de carácter familiar.

Impulso económico

 
Piezas de cerámica 
La ciudad ha tenido un gran impulso gracias a esta actividad económica, siendo la artesanía en Totana un detonante que la ha proyectado por toda España. Dado su carácter tradicional, que recoge la historia artística de la población en su artesanía, la permanencia en el tiempo y su forma de comercialización que fortalece la actividad artesanal y familiar, la artesanía en Totana tiene un carácter muy marcado que ha perdurado durante siglos.

En la elaboración de las piezas siguen antiguas técnicas heredadas y trasmitidas a través de generaciones. En ellas es fácil percibir la influencia árabe. Debe destacarse que estos productos son vendidos sin intermediarios.
No obstante, a pesar de la clara influencia de la tradición en la artesanía en Totana, los hábiles totaneros han sabido incorporar nuevas técnicas y métodos, diversificando la producción de vasijas y otros objetos de cerámica para cubrir requerimientos específicos y necesidades de cada época del año, demostrando el dominio y habilidad que tienen del oficio.

Tipos de Arcillas

Generalmente, en la elaboración de las piezas de artesanía en Totana se emplea una combinación de las arcillas roya, greda y negra, muy abundantes en las zonas de Los Huertos y en las Canteras del Carivete. Como cada objeto requiere una arcilla con textura y propiedades determinadas la proporción de las arcillas al combinarse puede variar.

La arcilla roya es maleable y puede extenderse incluso en finas láminas, pero eso hace a la pieza frágil para su manejo, razón por la que se mezcla con la arcilla greda, de escasa plasticidad pero mucha resistencia.

De esta manera la arcilla greda, que es blanca, le otorga dureza a las piezas. La arcilla negra tiene idénticas propiedades de ductibilidad que la roya, solo que la pieza finalmente tendrá ese color.

Proceso tradicional

De acuerdo al proceso tradicional que aún aplican muchas de las familias que han impulsado la artesanía en Totana, en la preparación del barro se realizan combinaciones estimadas de agua y arcilla. Esta combinación debe batirse hasta lograr el buen punto de mezcla.
 
Trabajando la arcilla en el torno 
Posteriormente, se elimina el agua sobrante y la mezcla se lleva a lo que denominan la “sobadora”, máquina utilizada generalmente para el estirado de masas que en este caso se emplea para darle homogeneidad a la mezcla.

Después, esta mezcla se pasa por un tamiz tupido para separar los posibles granos o piedras pequeñas, quedando finalmente el barro preparado para llevarlo al torno para realizar las piezas deseadas.
En el torno es donde ocurre el acto creativo. Se coloca una bola de barro sobre una mesa circular que forma parte del torno y se va realizando la forma deseada a medida que gira en el torno, recibiendo el barro la presión de las manos del alfarero.

Cuando la pieza está modelada se lleva al taller de cocción de piezas. Entre ellos se encuentran los tradicionales hornos árabes, catalogados por Patrimonio de Interés Cultural. De aquí emerge la pieza con un acabado particular propio de la artesanía en Totana.

Esta actividad se ha constituido en un emblema de la ciudad. A tal punto ha llegado su reconocimiento que en Totana se ha creado el Centro Tecnológico de la Artesanía de la Región de Murcia, que está ubicado en la Avenida Rambla de La Santa.