Las pinturas rupestres de los Abrigos del Pozo son una de las expresiones más impresionantes del arte rupestre de la región mediterránea. Las pinturas fueron incorporadas a la lista de patrimonio mundial de la Unesco.
Los Abrigos del Pozo estuvieron ocupados desde el Epipaleolítico, hace unos 8.000 años, hasta la época de la Romanización.
Los primeros pobladores se dedicaban a la pesca, la recolección y la caza.
Se calcula que las pinturas rupestres pertenecen al período Neolítico, ya que están datadas con una antigüedad que las coloca alrededor del 4300 a. C. El arte que se encuentra en los Abrigos representa figuras humanas, animales y objetos simbólicos.
Todo el complejo está acondicionado para recibir turistas, quienes hoy en día ingresan por el antiguo acceso que usaban los pastores en la época prehistórica.